Atrapados dos boricuas en los disturbios de Egipto

Uno logró salir, mientras la otra está en ruta a la Isla

Caroline M. Keller Reyes describe lo que vivió el sábado pasado: “Escuchaba los tiros, la gente protestando. Empezaron a quemar el edificio del partido político. El apartamento se llenó de humo y de gas lacrimógeno. No se podía salir. Me tuve que quedar en el apartamento. Era horrible”.

“Todo el que decidió quedarse cambió de opinión y llegó al aeropuerto. Allí no hay agua, comida, los baños están cerrados. La situación está imposible”, contó al hablar por celular al que se ha aferrado luego de que por dos días consecutivos -sábado y domingo-no hubiese ningún tipo de mecanismo para comunicarse con su familia.

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